Dependiendo de la ciudad o el país, hay varias opciones para moverse. El transporte público, como autobuses, trenes y subterráneos, suele ser la forma más rentable de moverse. Los taxis, Uber y otros servicios de transporte también están disponibles en la mayoría de las ciudades. También puedes alquilar un coche o una bicicleta si quieres explorar la zona de forma más independiente.