El parapente es más popular en las regiones montañosas debido a la presencia de corrientes térmicas y ascendentes que ayudan a levantar el parapente. Algunos de los mejores lugares para volar en parapente incluyen los Alpes franceses, los Andes en América del Sur, los Dolomitas en Italia, las Montañas Rocosas en los EE. UU., los Pirineos en España y el Himalaya en Nepal.