El Grand Tour es una tradición del siglo XVIII de un viaje educativo por Europa, generalmente realizado por jóvenes británicos de clase alta adinerados. El recorrido generalmente incluía paradas en ciudades como París, Venecia, Florencia y Roma. El propósito de la gira fue expandir el conocimiento de los jóvenes a través de la exposición al arte, la cultura y la historia.